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LA DEPILACION MEDIANTE LASER DE DIODO: UN METODO MUY EFICAZ PARA ELIMINAR EL VELLO NO DESEADO

domingo, 26 de julio de 2015

La eliminación del vello superfluo ha sido, durante décadas, una preocupación para las mujeres. 
Hoy en dia es cada vez más frecuente también en varones la utilización de métodos para eliminar el exceso de vello.

Los métodos tradicionales, como el arrancamiento del vello con cera, a menudo ocasionan problemas de foliculitis, especialmente en ingles, ya que el vello queda enterrado debajo de la piel.
Desde hace dos décadas los avances tecnológicos en los láseres han conseguido desarrollar equipos que emiten una energía que es capaz de llegar a la raíz del vello y destruirla. Hay varias tecnologías: el laser de alejandrita, el laser de diodo, el laser de neodimio, la luz pulsada… que pueden conseguir éste objetivo.

El láser de diodo ha demostrado una eficacia notable en eliminar el vello no deseado en cualquier localización y en cualquier tipo de piel (incluso piel de color). La diana son las células de melanina de la raíz del folículo piloso y también los microcapilares que nutren o dan vida a la raíz del pelo (como si se tratase de una planta que vive de los nutrientes y de la irrigación de su raíz).  
Se trata de una herramienta potente de uso médico y debe ser empleado por personal cualificado y bajo supervisión médica para evitar posibles efectos secundarios derivados del mal uso.

Se puede utilizar todo el año con la salvedad que está contraindicado sobre la piel broceada. En este caso se debe demorar el tratamiento un mínimo de 15 días. Los equipos de última generación disponen de un medidor de melanina que permite conocer el índice de melanina sobre la piel para valorar si pudiera existir un exceso y en ese caso se pospondría el tratamiento.

Es preciso realizar de 6 a 12 sesiones separadas de 6 a 8 semanas para garantizar una reducción de vello en cada  zona tratada.

LA GINECOMASTIA. UN PROBLEMA FRECUENTE CON UNA BUENA SOLUCION

martes, 21 de julio de 2015

Se denomina ginecomastia a la presencia de tejido mamario en los varones. La incidencia es de un 10% de la población.
Se trata de una patología estética acomplejante para los que la sufren.
Existen 3 tipos de ginecomastia: la ginecomastia pura, la adiposa y la mixta.
Está indicada la cirugía en todos los casos salvo en aquellos varones con sobrepeso en los que tendrán que corregirlo mediante dieta antes de valorar la intervención quirúrgica.
En los casos de ginecomastia glandular que significa que existe tejido mamario (igual que el de una mujer) se realiza una mastectomía subcutánea para extirpar el tejido glandular. Es conveniente intervenir no solo por motivos estéticos sino porque ese tejido mamario puede malignizar y dar lugar a una cáncer de mama.
Las ginecomastias mixtas o adiposas se tratan preferentemente mediante liposucción. Es más efectiva la liposucción asistida por ultrasonidos o por láser o la vibroliposucción ya que la liposucción tradicional a menudo no puede extraer una grasa en general muy fibrosa, entremezclada con tejido glandular. En ocasiones después de realizar la liposucción se extirpa el tejido mamario residual a través de una pequeño corte en la areola.

Se trata de una intervención relativamente sencilla sobre todo cuando se realiza solamente la liposucción, con una recuperación en el plazo de una a dos semanas.






LA OTOPLASTIA, UNA INTERVENCION MUY GRATIFICANTE

lunes, 13 de julio de 2015

Las orejas prominentes, (también llamadas orejas en soplillo u orejas Dumbo…) son causa de
complejos en las personas que padecen ésta deformidad estética. Es un problema que tiende a
estigmatizar a aquellos que lo sufren. Se pueden presentar de forma uni o bilateral y existen
muchas variaciones dada la complejidad de la anatomía de las orejas.

La otoplastia es la intervención que corrige ésta problemática. Existen diversas técnicas
descritas aunque todas ellas se centran en remodelar el cartílago auricular para reposicionar
las orejas en una situación correcta. A menudo las orejas son grandes y el especialista debe
reducir o recortar fragmentos de cartílago y también de piel. Como sucede en otras
intervenciones es recomendable obtener un resultado natural.

La cicatriz se sitúa en la región posterior de la oreja aunque a menudo existen cicatrices en la
parte anterior o en la curvatura (hélix).

La intervención se efectúa con anestesia local o general dependiendo de los casos, de la edad
del paciente y de la complejidad de la intervención.

La recuperación requiere entre una y dos semanas, período en que se hace evidente el
resultado. Los pacientes recobran la autoestima y se sienten felices.


DESCRIBIMOS LA INTERVENCION DE ABDOMINOFLANCOPLASTIA

lunes, 6 de julio de 2015

La abdominoflancoplastia es una intervención que combina la abdominoplastia con la flancoplastia. Tambien se le denomina como abdominoplastia circunferencial.

Es una intervención que corrige principalmente la flacidez en el tronco. El tronco es la región anatómica que abarca el abdomen por delante, los flancos o caderas por los costados y la región dorsolumbar por detrás.

Esta intervención se realiza generalmente en personas (tanto hombres como mujeres) que tras adelgazamiento importante presentan una flacidez importante de forma circunferencial, acompañándose también de caída o descolgamiento de los glúteos.

La abdominoplastia es la intervención que se realiza de forma aislada en mujeres, que tras los embarazos sufren distensión de la musculatura abdominal, depósitos de grasa localizados encima y por debajo del ombligo y flacidez o exceso de piel en el abdomen, sobre todo en la parte baja. Cuando además presentan un grado más extenso de flacidez será preferible realizar la abdominoflancoplastia para obtener un resultado óptimo, al tratar todo el tronco de forma simultánea. Además se consigue elevar los glúteos caídos.

Esta cirugía conlleva una cicatriz circunferencial que se sitúa en la “línea del bikini”. Es importante ubicarle de forma precisa para que se pueda ocultar fácilmente con ropa interior o bikini.
Se trata de una cirugía de cierta envergadura. Se realiza bajo anestesia general y conlleva una hospitalización de 2 a 3 días. Requiere un equipo multidisciplinario, con dos cirujanos plásticos, un anestesista especializado en contorno corporal y la enfermera instrumentista. La recuperación es de una a dos semanas.

Los resultados son impresionantes cambiando totalmente la forma de la silueta del tronco. Es  la cirugía del contorno corporal más importante.