Los parpados caídos y las bolsas debajo de los ojos tienen buen tratamiento con las nuevas técnicas de cirugía plástica y estética.
La herencia genética hace que se hereden los párpados y las bolsas de debajo de los ojos. El paso del tiempo también influye y la piel va cayendo por la gravedad.
Para mejorar todo esto existe una operación que se llama blefaroplastia. Se realiza de forma rápida y el resultado es espectacular, se reducen años en la expresión y ya no tiene cara de cansancio.
Las bolsas de grasa que se hacen debajo de los ojos se eliminan de forma rápida y con anestesia local.
En los párpados caídos el exceso de piel hace que, cuando la persona no está hablando, el ojo está más cerrado. La musculatura se va relajando con el paso del tiempo y el ojo pierde vivacidad.
Generalmente, hasta los 12 o 15 años después de la operación, no vuelven a aparecer las bolsas, aunque no son operaciones que vuelvan a repetirse.
Después de la operación, los ojos quedan amoratados y lloran un poco. Los primeros días hay que hacer reposo y ponerse gasas heladas. Al tercer o cuarto día ya se puede ir a trabajar.